El foco está en el cliente
Mauricio Martinez / Experto en Marketing – Especialista en Gerencia Estratégica de Negocios
mauriciomartinezvalderrama@gmail.com
El foco está en el cliente, más que en el producto.
Durante mucho tiempo diferentes teorías nos han llevado a redoblar nuestros esfuerzos en crear productos, ponerlos en el mercado, comunicar sobre ellos, generar canales de distribución para los mismos y buscar lugares dónde comercializarlos, llevando al empresario a generar mayores inversiones en campañas publicitarias y demás esfuerzos para que dichos productos sean consumidos; “Lo cual no significa que está mal”. Sin embargo en la actualidad el mercado pide un cambio de enfoque que lleve a los emprendedores a entender lo que realmente los consumidores desean y para qué lo desean, siendo esta una manera más eficiente de enfocarse en solucionar necesidades latentes, más que en la creación de productos que de manera ciega se pueden desarrollar y pueden llevar su empresa al fracaso.
Es por esto por lo que el Marketing nos incita a entender a los consumidores, conocer sus necesidades, ponernos por un momento en sus zapatos y entender lo que quieren satisfacer, con el fin de poder brindar soluciones ajustadas a la medida de quienes realmente consumirán lo que seguramente se creará con posterioridad.
En consecuencia, el reto que nos exige la actualidad es ser generadores de buenas ideas; Ideas que estén ancladas a los hallazgos que, encontrados en los procesos de investigación y de conocimiento de los consumidores, permitiran dirigir esfuerzos enfocados en determinado nicho de mercado, aumentar la probabilidad de que, lo que se lance al mercado como iniciativa de innovación, pueda tener una verdadera aceptación y por encima de todas las cosas, propicien mayor rentabilidad como resultado fundamental y esperado por todo aquel que desea ser empresario.
La invitación es a que, como lo cita el libro “La estrategia del océano azul” de W. Chan Kim y Renée Mauborgne, se desarrolle la capacidad de dejar de competir por ser parte de un mercado bastante explotado y que no ofrece mayor rentabilidad, para arrancar con nuevas ideas de negocio innovadoras que suplan necesidades diferentes a las que ya están en disputa. Con esto se alcanzará la posibilidad de tener precios más altos y utilidades más grandes como resultado final.
Para esto es importante desarrollar los siguientes hábitos:
- Generar un ambiente de constante investigación y conocimiento del mercado.
- Estar siempre en búsqueda nuevos nichos de mercado.
- Entender lo que desea el cliente y para que lo desea.
- Generar ideas innovadoras para solucionar insatisfacciones actuales y no desarrollar productos “novedosos” que a la larga no solucionan nada (enfoque de consumidor y no de producto).
Si bien conocer lo que el cliente desea no implica el éxito de un producto o servicio lanzado al mercado, sí conlleva a reducir los riesgos de fracaso que se pueden dar en uno de los momentos más importantes de una compañía… la etapa de emprendimiento.