Educación, Cordura y Desarrollo
Por: Armando Chavarro – Coach de Vida, Experto en Tecnología de Estudio.
Un buen nivel de cordura social puede lograrse únicamente mediante un alto nivel en cuanto a la educación. Todo está en la educación. Todo radica en la educación.
El valor de la cordura, la racionalidad y la sana convivencia en la sociedad, es invaluable. Una sociedad para sobrevivir necesita un alto nivel de cordura. De no ser así, esta sociedad se deteriora, sucumbe, se sumerge en conflictos familiares, sociales, guerras, destrucción… Un buen nivel de cordura social puede lograrse únicamente mediante un alto nivel en cuanto a la educación. Todo está en la educación. Todo radica en la educación.
No podemos aspirar a tener una sociedad productiva, pacífica, con comportamientos sociales y constructivos, cuando se observa que los procesos educativos son deficientes. Y es que lo vemos a diario… vemos cómo un alto, altísimo porcentaje de niños, jóvenes e incluso adultos estudiantes, tienen problemas con sus estudios, con sus materias, con sus logros. No comprenden, no pueden aplicar los conocimientos que reciben o han recibido. Se bloquean y finalmente fracasan.
La creciente demografía, en lo que se incluye la migración, por supuesto, hace que las aulas sean insuficientes, así que hay que construir salones y tratar… que la mayoría de nuestros niños puedan asistir a la educación elemental/elementary school, educación secundaria/high school y finalmente a los estudios superiores, college/universidad. Ese pareciera ser uno de los principales retos y propósitos del Estado; que ningún niño, que ningún joven se quede sin estudiar y alcanzar los mejores niveles académicos y de posterior desempeño al entrar a la etapa productiva… y eso está bien.
Ahora… ¿Qué clase de educación están recibiendo? No es suficiente ampliar los cupos… construir salones e incluso edificios y dotarlos de recursos técnicos, tecnológicos y físicos; computadores, conexiones de alta velocidad a internet, IA y demás. Es indispensable mejorar la forma en que se les están entregando los conocimientos a los estudiantes niños, jóvenes o adultos.
Es necesario e indispensable que tanto los educadores como los estudiantes y, en todo caso, conozcan y manejen técnicas y metodologías de aplicación prácticas y funcionales de estudio, que les permitan encontrar las vías de la comprensión, entendimiento y la aplicación efectiva de sus y conocimientos.
Es decir, adoptar procesos formativos transformacionales que permitan a las personas, una vez culminados sus estudios, construir casas, edificios, vías o puentes y que no se les caigan, si es que estudiaron para eso; sencillamente, que puedan entender, comprender y aplicar eficientemente aquellos datos recibidos en el aula, de manera eficiente y eficaz.
Estamos hablando de que los egresados o graduados, puedan ejercer la abogacía, administración de empresas, medicina, veterinaria, agronomía; por solo mencionar unas cuantas carreras, profesiones u oficios, sin el riesgo o temor del fracaso; donde el fracaso educativo no sea una opción. Que puedan realmente aplicar, contribuir al desarrollo de la sociedad, realmente ser útiles a su país. Y esto es posible.
Sólo se requiere un poco de esfuerzo, romper esquemas y paradigmas pedagógicos, uniendo la teoría con la práctica y el correcto uso un lenguaje liviano y comprensivo libre de supresión con la intención y la atención puesta en el proceso enseñanza-aprendizaje en doble vía cumpliendo de este modo con ofrecer una verdadera educación y formación para la vida.
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